La huída de jesús


Abu Ja'far Muhammad ibn Jarir al-Tabari, en su famoso Tafsir-Ibn-i-Jarir at-Tabari escribe: "El y su madre, María, tuvieron que emigrar de Palestina y partir hacia un país lejano, pasando de país en país".

Jesús, según los relatos bíblicos, se había encaminado hacia Emaus, hacia el valle de Josafat, habría pasado a través del Occidente de Judea y habría llegado a Samaria, un país en el que les estaba prohibido entrar a los judíos. había alcanzado finalmente Nazareth, encaminándose al lago Tiberíades (Juan, 21, 1). De Nazareth partían las grandes caravanas en ruta hacia Damasco.

A tres kilómetros de Damasco existe un lugar que desde entonces y hasta hoy se llama Maqam-I-Isa (el lugar de estancia de Jesús). Jesús debió haber vivido ahí el tiempo suficiente como para convertir en discípulos suyos a Ananias y otros.

Durante su estancia en Damasco Jesús recibió una carta del rey de Nisibis, en la que se le informaba que el mencionado rey había caído en una grave enfermedad y que pedía a Jesús que acudiera para curarle. Jesús envió una contestación diciendo que enviaría a uno de sus discípulos y que él mismo seguiría más tarde, según leemos en la Biblioteca Cristiana Ante-Nicena, Vol. XX (Documentos siríacos, 1). Jesús sabía que algunas de las tribus perdidas de Israel estaban en Nisibis, circunstancia que también mencionó el historiador Josephus. Pero se da cuenta de que es hora de marcharse de Damasco para salvar su vida (Actos, 9, 23).

Muhammad bin Khavendash bin Mahmud, comúnmente llamado Mir Khwand, escribe en su famoso libro Rauzat-us Safa que se ha convertido en un libro persa de história clásico: "Jesús y María abandonaron la ciudad y se encaminaron hacia Siria" Voy a cambiar rápidamente de fuentes para leer en el Sagrado Corán (23, versículo 50): "E hicimos con el hijo de María y con su madre, un milagro y les refugiamos en una benéfica colina provista de manantiales".

En la obra Jami-ut-Tawarihk se nos explica que durante estos días María, la madre de Jesús llevaba un bastón en su mano y caminaba a pie. A continuación el autor nos cuenta que Jesús se encaminó hacia el rey de Nasibain (Nisibis) y predicó allí. Desde esta ciudad marchó hacia Mashaq, donde está situada la tumba de Sem, hijo de Noé. Descripción similar podemos hallar en la obra Nasikh-ut-Tawarihk (vol. 1, 28). Ni en el Jami-ut-Tawarihk, ni en el Rauzat-us-Safa, hallamos explicación alguna para la repentina marcha de Jesús de Nisibis. Sin embargo sí la hallamos en la obra de Ibn-i-Jarir, Tafsir-Ibn-i-Jarir-al-Tabri (vol. 3, 197): "El rey (de Nasibain) era un hombre astuto. El pueblo quería matarlo (a Jesús) y éste huyó".

En aquella época existían tres ciudades con este nombre. A saber: una entre Mosul y Siria, la segunda a orillas del Eufrates y la tercera cerca de Jalap, en Siria. En el libro Majma-ul-Buldan publicado en 1207, leemos que la primera de ellas está situada en la ruta de las caravanas de Siria a Mosul y más allá y que está situada a una distancia de seis días de viaje de Mosul. Mosul era un importante centro de comercio. Edessa, conocida ahora por el nombre de Urfa, no está lejos de este lugar. De Urfa a Aleppo hay cuatro días de viaje y Aleppo está situada en lo que siempre ha sido la gran ruta del comercio entre el Océano Indico y el mar Mediterráneo. Ain-ul-Arus está situada a sólo unas cuantas horas de viaje de Aleppo. Así pues, Jesús fue a todos estos lugares para llegar a Aleppo y proseguir su viaje. En Ain-ul-Arus está la tumba de Sem, hijo de Noé, lugar en el que también han sido encontrados vestigios hititas. Así, Jesús visitó la tumba de Sem durante su viaje.

Desde que el pueblo de Nisibis quiso matar a Jesús, y dado que él no podía ir muy lejos en pocos días, viajó de incógnito bajo el nombre de Yuz Asaf, y los libros y tradiciones locales de las regiones que visitó o por las que pasó después de su marcha de Nisibis hablan de él llamándole Yuz Asaf. En la obra Farhang-i-Jahang y en el Anjuman-i-Arae Nasiri leemos que Asaf fue uno de los grandes países no árabes. En el Burhan-i-Qate Asaf es el nombre dado al hijo de Barkhia, que fue uno de los eruditos de Beni Israel.

En el Farhang-i-Anand Raj el nombre Yuz se explica como "procurador o líder". Ambas palabras son hebreas. Pero ninguna de las obras citadas explica realmente qué significa Yuz Asaf y no le hallamos explicación lógica a la luz de los significados aportados. En el libro Farhanf-i-Asafia se explica de la siguiente forma el significado de Asaf: En tiempos de Hazrat Isa (Jesús) cuando los leprosos fueron curados por él, éstos, habiendo sido admitidos entre la gente sana que estaba libre de enfermedades, fueron llamados Asaf.

Así, la palabra Asaf fue aplicada a los leprosos curados por Jesús. Por lo tanto, Yuz Asaf significa "el procurador o líder de los leprosos curados por Jesús". ¿Quién podía ser esa persona, sino Jesús mismo? El nombre Asaf, teniendo así un significado especial conocido en aquella época por las pocas personas que rodeaban a Jesús, sirvió para el propósito y le describía con mayor propiedad que cualquier otro nombre que hubiera podido adoptar. Faizi, el poeta de la corte de Akbar, cita a Jesús:

"Aiyki nam-i to: Yuz o Cristo" (O tú cuyo nombre es Yuz y Cristo).

Más tarde volvemos a encontrar a Jesús en el Irán. Allí se sabe de Yuz Asaf que vino de un país situado al Oeste y que predicó aquí y que mucha gente creyó en él. Los recuerdos que se tienen de Yuz Asaf en las tradiciones iraníes, son similares a los que se tienen de Jesús.

Rastros de Jesús se hallan también en el Afganistán: en Angazni, en el Oeste, y en Jalalabad, en el extremo Sudeste del Afganistán, existen dos explanadas que llevan el nombre de Yuz Asaf, ya que aquí había predicado. Uno de los emires del Afganistán nombró uncelador para esta parcela en Jalalabad, e igualmente donó una subvención para su mantenimiento.

Muy cerca ya de la actual frontera entre el Pakistán y Cachemira aunque todavía en el lado paquistaní, volvemos a encontrar datos sobre el paso de Jesús por la localidad de Taxila. Allí estaba Tomás esperando la boda de un hijo de Gad, hermano del rey Gondafras. Así está escrito en el acta Thomae:

.."Tomás, terminadas las ceremonias, abandonó su sitio. El novio apartó la cortina que le separaba de su novia. Vio a Tomás, según supuso, conversando con ella. Entonces le preguntó sorprendido ¿Cómo puedes estar aquí? ¿No te ví salir antes que a nadie? Y el Señor contestó: No soy Judas Tomás, sino su hermano".

Debo hacer un breve inciso aquí para aclarar que Juan llama también a Tomás por el nombre de Didimo, correspondencia griega del arameo Toma, que significa "mellizo", a causa del extraordinario parecido físico entre Tomás y Jesús (Juan, 20, 24).

Tomás acompaña a Jesús en su huída de Jerusalén hasta Cachemira. Así, aparece junto a María, madre de Jesús, en el momento en que se supone que debería haber tenido lugar la resurrección (Actos, 1, 13-14), aparece también junto al lago Tiberíades (Juan, 21, 1-2), aparece en Damasco y en Magdonia (Nisibis), y aparece ahora en Taxila, como acabamos de ver. A partir de aquí acompaña a Jesús a Cachemira, en donde se encontraba también en el momento de la muerte de éste. Luego retrocedería hasta Taxila para seguir hacia Kerala en el Sur de la India, siendo muerto y quemado en Milarope, Madras.

© Andreas FABER-KAISER
fuente: Web AFK